"Estar casada durante veintiún años con el mismo patán sigue siendo nada fácil para ella, y es que cada día le pesa más decir "mi marido", cuando de sobra sabe que hace más de diez años dejó de serlo.
Cuando su madre le sugirió el divorcio, ella levantó la mirada al cielo -como si no se le hubiera ocurrido desde el primer día de infierno-. Ella sabe que es un proceso difícil que no ha podido enfrentar durante tanto tiempo, por eso decidió empezar por separarse de él, con la intención de que la distancia le hiciera comprender a él lo que tuvo, tiene y lo que podría perder"
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De sobra sé que las personas que nos hacen daño no tienen la culpa de nuestro sufrimiento, la tenemos nosotros mismos por permitirlas en nuestra vida.
Papá, gracias por en serñarme a ser
lo que nunca me gustaría ser.
3 comentarios:
<<...Cuantas veces yo se lo dije, y cuantas otras no me quiso escuchar...hasta que un día (y bien dicen: el conocimiento es poder), obtuvimos las pruebas necesarias, quizás necesarias para ella misma, para verse libre definitivamente...>>. La libertad está en uno mismo, la posibilidad de tener otra destino, tarde o temprano. Me gustó tu post. Saludos!
Hey! Me avisaron que eres seguidora del blog! Gracias!!!
No hay de que ;)...
Saludos!
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