Pesadilla.

Hoy soñé que tenía un novio de sonrisa linda y ojos tristes, inofensivo, inteligente, lleno de virtudes y talentos, pero eso fue cambiando poco a poco. Nuestras conversaciones largas e interesantes se transformaron en peleas motivadas por sus celos enfermizos que lo llevaron a desconfiar de mi, a revisar los contactos de mi celular y los mensajes. Un día me pidió la contraseña de mi messenger y yo para demostrarle mi sinceridad se las di, entonces aprovechó para robarse mi lista de contactos pudiendo así investigar a cada uno y obtener información extra de mi.

Después me hizo creer que había una sociedad secreta llamada ENDI, se supone que era una sociedad de alto poder adquisitivo, intelectual y político que residía en una casona en Coyoacán y quería hacernos daño por que yo había salido con un judío que había defraudado a esa asociación y se querían vengar de él lastimándome. Él me dijo que Gustavo y Antonio, dos de mis amigos pertenecían a ese clan, pidiéndome que me alejara de ellos.

Sus aliados para engañarme: "Jarvups" él era uno de los mejores amigos de mi novio pero yo nunca lo conocí y aprovecharon eso para hacer su juego. También un tal "Ron Suris", en realidad este último era el alter ego de mi novio, bajo esta personalidad él pretendía ponerme un cuatro para que yo confesara "la verdad", mi novio creía que yo le era infiel a cada respiro y hasta con sus primos.

Este novio mío era tan mentiroso que un día me dijo que le habían dado una golpiza y que su hermana le había quitado los moretones con una cuchara helada, obviamente siemrpe lo dudé pero yo lo amaba tanto que preferí creerle a pesar de que mi mejor amigo me sugería tatuarle la piel con un "MITÓMANO" que le cubriese la frente.

Antes de despertar, su mentira se le cayó a moronas, él huyó de su casa y hasta le robó a sus padres por segunda vez. Yo supe todo cuando hablé con su hermana y al preguntarle sobre los moretones y la cuchara fría me dijo que eso no había pasado... esa llamada me hizo concluir que yo no conocí bien a la persona con la que dormí ocho meses, ¡TODO HABÍA SIDO MENTIRA!... colgué el teléfono, resbalé mi espalda sobre la pared hasta llegar al piso, mientras las lágrimas salían empecé a atar los cabos sueltos, mi cuerpo temblaba me sentía frustrado, iracundo, quería golpearlo y gritarle en la cara... Pero desperté!

"Feliz Aniversario, mi amor" le dije mientras yo sonreía burlándome.