Nunca he podido tener más de dos citas con alguien de mi edad, siempre terminé escuchando historias de cómo se ligó al niño más guapo de Lipstick, cada cuándo va a ZARA, a dónde va a putear, a qué gimnasio va, cuátos famosos conoce, qué quiere ser de grande o temas wannabe.... Siempre preferí salir con personas mayores que yo, por que, aunque la edad no es sinónimo de madurez, es más seguro que la tengan pasando los 23 años, pues a esta edad ya tienen una lista de logros BÁSICOS que perfilan la personalidad, como una carrera terminada, hablar inglés, tener un sueldo y un poco de cultura general, o ¡por lo menos! un tema de conversación que no sea el típico.
Se supone que cuando dices "¡Siií!, quiero ser tu novio" (o cuando lo propones) es por que ya has ponderado sus características emocionales, intelectuales, físicas y cualidades valiosas, para no dar lo que uno tiene a un imbécil que no lo valorará, tomará en cuenta o apreciará en su totalidad.





